Existe la creencia de que los probióticos son capaces de mantener en remisión la Enfermedad de Crohn. Para llegar a esta conclusión se han celebrado diferentes estudios. Los científicos han comenzado a explorar el uso de ciertas cepas de probióticos para tratar la enfermedad de Crohn, junto con otros tipos de afecciones intestinales.  Como asegura Kelly O’Connor dietista registrada en el Mercy Medical Center en Baltimore “Los probióticos son bacterias buenas, que se cree que mejoran la digestión, absorción y transformación de los alimentos a través del tracto intestinal”. También existen investigaciones en la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda que utilizaron una cepa probiótica de E. coli para tratar y reducir los efectos negativos de una infección de E. coli asociada con la enfermedad de Crohn.

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¿Qué son los probióticos?

Los probióticos son bacterias vivas beneficiosas (a menudo llamadas «buenas» o «amigables») y que normalmente viven en los intestinos. En circunstancias normales, estas bacterias “buenas” mantienen a a raya el crecimiento de bacterias nocivas en el cuerpo. Si el equilibrio entre las bacterias buenas y malas es malo puede dar lugar a que las bacterias dañinas se multipliquen en exceso y de ahí vendrán síntomas como diarrea y demñas problemas digestivos. Por tanto, los probióticos se utilizan para restaurar el equilibrio de estas bacterias  en el cuerpo. Están disponibles en forma de suplementos dietéticos (cápsulas, tabletas y polvos) o alimentos (yogur, leche fermentada y sin fermentar, el miso, el tempeh, y algunos jugos y bebidas de soja).

Como hablábamos antes hay algunas pruebas que sugieren que el uso de los probióticos pueden ayudar a las personas con la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa para mantener la remisión.

Tomar probióticos es generalmente seguro. Los posibles efectos secundarios (tales como gases o hinchazón) son generalmente leves.

¿Por qué los probióticos podrían ayudar a pacientes con enfermedad de Crohn?

En el primer año de vida de los humanos, hay pocas especies de bacterias en su cuerpo, y una gran cantidad de ellas son bifidobacterias. Con el paso del tiempo las bacterias van acumulándose a medida que nos exponemos a ellas durante toda nuestra vida. Nuestro sistema inmunitario reconoce las bacterias que son necesarias y que pertenecen a nuestro cuerpo, así como las que no lo son. A medida que se añaden nuevos microorganismos al sistema y medicamentos tales como antibióticos, algunas de las bacterias útiles que habitan en nuestro organismo pueden ser destruidas o su número disminuir.

En las personas con enfermedad de Crohn el sistema inmunológico identifica erróneamente ciertas bacterias como invasores extranjeros. El cuerpo monta una respuesta inflamatoria, que no se resuelve correctamente. Con el tiempo, la mucosa intestinal es dañada por esta inflamación implacable. Podríamos decir que el sistema inmunológico ataca los organismos que piensa que no pertenecen a nuestro cuerpo, de ahí se produce la inflamación, ya que nuestro propio sistema se ataca. Se cree que si hacemos un uso correcto de suplementos dietéticos probióticos para restaurar los microorganismos originales de nuestro tracto digestivo, podemos ser capaces de dominar un sistema inmunitario demasiado agresivo y mantener los brotes de Crohn bajo control. Esta teoría viene dada por  Bruce Silverman, un gastroenterólogo de la Gastroenterology Associates en Olimpia , Wash, EEUU. «En un subgrupo de pacientes con enfermedad de Crohn, los probióticos puede ser más eficaces cuando se combina con ciertos antibióticos que reducen los niveles de competencia. » apuntada.

En resumen, la ingesta de probióticos apoya la salud del microbioma normal y del el intestino en sí.

Por desgracia, los ensayos clínicos controlados han sido relativamente pocos y distantes entre sí. Mientras que los probióticos son beneficiosos en la teoría, las personas con EII deben consultar con su médico antes de comenzar cualquier nuevo régimen de suplementación probiótica. No hace falta decir que los pacientes no deben comenzar a tomar los probióticos si esto significa que tienen la intención de dejar de tomar los medicamentos recetados por su médico.

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¿Cuáles son las mejores probióticos para la enfermedad de Crohn?

«El colon (intestino grueso) es un tanque séptico. Su función es la de convertir los residuos líquidos en residuos sólidos «, explicó el Dr. Silverman. «En el colon ocurre que las bacterias se agrupan, se hacen sólidas y liberan agua y electrolitos para la reabsorción.» Las bifidobacterias, son los más eficientes en el desempeño de estas funciones. Debido a que nuestro sistema inmunitario reconoce como propias a estos organismos en el cuerpo, es menos probable que estimule una respuesta inflamatoria inmune cuando se utilizan los probióticos que contienen bifidobacterias”, dijo Silverman.

Hay que tener en cuenta que» No todos los probióticos son iguales, y algunas bacterias van  a ser más eficaces que otras en nuestro organismo» dijo Silverman. «Se dan muchas marcas en el mercado que se venden como probioticos pero estoy puede dar lugar a confusión ya que no existe una regulación de la industria y, de hecho, un producto comercializado como un probiótico puede incluso no contener los niveles de microorganismos indicados en la etiqueta.» Debido a que los probióticos no están regulados por la industria alimenticia, es importante comprar marcas de confianza solamente. También hay que tener en cuenta que no hay dos sistemas inmunes son exactamente iguales. No hay dos casos de la enfermedad de Crohn exactamente iguales y diferentes personas pueden responder de manera diferente al misma probiótico.

Mientras que la evidencia científica tarda en llegar, habla con tu equipo médico para ver lo que piensan acerca de agregar un suplemento de probióticos a tu dieta. Ellos pueden ayudarte y, en muchos casos, puede que no pierdas nada con probar.

Alimentos probióticos que pueden afectar de forma positiva a la salud de un enfermo de Crohn

El alimento probiótico más conocido es el yogur. Se encargará de reforzar el sistema inmunitario, ayudará a reducir infecciones y  evitar que se produzcan inflamaciones.
Entre algunos de los otros alimentos probióticos destacamos:

Kombucha

Este hongo chico no es más que una bebida endulzada que está compuesta por toda una gran cantidad de bacterias. No solamente se encargará de prevenir algunos de los síntomas más graves de la enfermedad sino que también hará lo mismo con la artritis y otras enfermedades destacadas.

Kéfir

El kéfir es otro producto probiótico que puede ser desconocido para el público pero que tiene una cantidad de beneficios muy positivos. Se trata de un producto que es bastante similar al yogur búlgaro que procede directamente de la región caucásica de Rusia. Tiene una estructura un poco más densa que el yógur y es algo más amargo, no obstante, forma parte de una gran cantidad de recetas increíbles.

Cuchrut

Probablemente el chucrut te suene más. Se trata de una comida típica de Alsacia, Alemania, Rusia y Polonia que es muy sencilla de preparar y respetuosa con el cuerpo. Para poder preparar el plato hay que poner a fermentar hojas de coliflor con un poco de sal y agua.

Kimchi

Este plato es también es probiótico. Para prepararlo se utiliza col china, ajos, cebollas y pimiento rojo. Además, también se suele utilizar picante; si se va a preparar este plato, algunos elementos deberían ser descartados ya que se tiene constancia de que el picante no suele ser un buen aliado para la enfermedad de Crohn.

Sopa de miso

Es una receta tradicional de Japón que está hecha con el ingrediente principal Soya.

Pulque

Y por último tenemos esta bebida mexicana muy espesa y de un característico color blanco. Se extrae directamente de la fermentación del jugo de maguey.